Tenía ya la versión 2.3.3 y una de las menos estables de WordPress, así que he decidido cambiar. Dicen que año nuevo, vida nueva, y nuevos propósitos para el nuevo año y así es, al menos por mi parte.
No os voy a contar mi vida de lo que me espera este año, pero muchos muchos cambios. Vida personal, profesional y demás, pero vamos a la vida del blog.
En estos 4 días de nuevo año estoy actualizando más que en la última mitad del año pasado e incluso he migrado a WP 2.7 y lo que menos me gusta sigue siendo como en las últimas versiones, la subida de archivos.
Sé que para los más nuevos puede ser un gran aliado, pero yo que he visto crecer WP desde las primeras versiones, me he acostumbrado al trabajo y código de aquellas versiones y siempre me ha gustado toquetar el core de la aplicación, aunque no en mi blog.
En BlogdeBlogs tenemos una versión muy muy diferente a la original con muchos hacks y comportamientos diferentes, aunque basada en la 2.2.1. Mucha gente me pregunta por la migración a las nuevas versiones pero me da auténtico pánico pensar que tendré que volver a cambiarlo todo si definitivamente instalamos WP 2.7 en todos los blogs. Ya se verá, pero por el momento no.
Y lo que os quería comentar, es que me he instalado la versión más moderna en este blog porque lo que más me gusta es el panel de administración, mucho más claro y elegante y poco a poco otras cosas que os iré descubriendo.
Nota: Espero que no se me vuelva a olvidar publicar en WP y consiga más o menos un blog estable en cuanto a ritmo de publicación.
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