Me da igual que me tachen de fascista o de crítico exagerado, pero creo que contra el terrorismo no existen ni partidos políticos, ni ideologías ni nada que se pueda pensar en un Estado de Libertad y de Derecho.
Me acabo de enterar de la legalización de Sortu, aquellos que nos mataron (a nosotros, los españoles) desde finales de la década de los 60 hasta hace unos pocos meses; casi 50 años de terror, de noticias de atentados, coches bomba y sin poder vivir tranquilo en mi país.
Creo que cualquier insulto dedicado a este grupo -no merecen calificativo de personas- es poco comparado con el daño que han hecho a las víctimas y la sociedad en general. Aun así, veo que sigue habiendo gente que piden la excarcelación de uno de los mayores asesinos (no en acto, pero sí en ideas) para «que Sortu tenga un candidato». Ya sólo nos falta darles una pistola y ponernos delante para que nos asesinen…
Al menos lo único que espero de esta sociedad que tanto ha criticado a los políticos, tanto PPSOE como otros tantos, esos que se hacen llamar indignados y compañía, esos políticos de partidos minoritarios que no les parece nada bien y que sólo ellos son los que saben gobernar España. Cada uno allá con sus ideologías, pero si creen en España como única nación y fueron lo que saltaron primero tras varios casos de corrupción, que sean ellos los que tiren la primera piedra.
De momento no veo muchas reacciones en twitter, ni con hashtag #sortu ni con #indignados ni mucho menos con #21J. Espero que sea cuestión de tiempo y que igual que han conseguido cosas, consigan la más importante: el derecho a vivir.
Porque con mi vida ni con la de los mios se juega.
