Lo primero decir que tanto una como otra son compañías de bajo coste y que el billete sencillo, e incluso a veces el de ida y vuelta, me ha costado menos de 100 euros, una gran ventaja frente a otros operadores.
Hoy me ha tocado madrugar para venir a Barcelona con la compañía vueling.com. El vuelo salía a las 6 de la mañana de Barajas y aterrizaba a las 7:15 según la compañía. Pues bien, la primera pega es que en Barcelona, tras aterrizar, hemos hecho un tour turístico por la pista hasta llegar al aparcamiento del avión. Por supuesto, traslado en autobús hasta la terminal donde no han tardado en exceso las maletas. En conclusión, he salido de mi casa de Madrid a las 4:50 y he llegado a Barcelona a las 8 de la mañana, porque el traslado desde el aeropuerto tarda 20 minutos en transporte público. Es decir, casi 3 horas para un vuelo de 45-50 minutos en el aire. Se va a acabar más pronto cuando pongan el AVE…
En Easyjet, por el contrario, he hecho ya 6 viajes, y todos han sido con traslado desde la terminal hasta el avión y viceversa a través de fingers (el aeropuerto de Bristol no lo cuento porque es muy pequeño y se va andando al avión).
Al entrar al avión de esta mañana, los asientos eran de cuero, por lo que una cosa a favor de vueling y te ofrecían un caramelo al final del vuelo, cuando comenzaba a descender. Por el contrario, el servicio de bar a bordo es muy caro. Te cobran algo más que en easyjet, por lo que prefiero esta última. En la primera la lata de 33 cl. de refresco cuesta 2 euro, mientras que en easyjet cuesta 1 euro la lata de 20 cl.
El embarque en easyjet se hace sin número de asiento, es decir, todo a «mogollón», mientras que en vueling se hace por el método tradicional que al embarcar, te asignan un asiento previa pregunta «¿pasillo o ventana?».
En definitiva, las compañías de bajo coste me parecen una buena opción para viajes de jóvenes o viajes informales. Las compañías conocidas como Iberia, KLM, Air France, Lufthansa o British Airways son la mejor opción para agentes de negocios y familias pudientes. Yo personalmente que busco calidad al mejor precio me quedo con las primeras, ya que no busco una comodidad excesiva, un trato perfecto y una comida lujosa.
Como información curiosa, en vueling te tratan de «tú».
Comentarios
10 respuestas a «Vueling vs. Easyjet»
La verdad es que después de lo que pasó este verano con las compañías de bajo coste que se cayeron este verano, y la entrevista que publicaron de un piloto, me da un poco de reparo estas compañías.
Claro que por detrás también hay muchos intereses económicos de las grandes compañías de desprestigiar a las de bajo coste.
En fin, no sé, se admiten que me expliquen lo de los vuelos de bajo coste
otroa curiosidad de vueling aparte de tu, durante la aceleracion para despegar un «azafato» gritaba vuuuuuuuu y en el momento de dejar tierra terminava con el eeeliiinggg
Pues falty solo he volado una vez con vueling y no han dicho nada. ¿será que eran sólo azafatas?
El jueves vuelvo a volar así que ya contaré más anécdotas
El tiempo que has tardado es el mismo que con cualquier compañía.
Siempre sueles irte una hora/hora y media antes de que salga el vuelo, ese tiempo no lo cuentes.
Luego, el tiempo que tardan desde que aterriza el avión hasta que sales depende del trafico del aeropuerto, no de la compañía: yo los 10 últimos vuelos que he hecho a Barajas, siempre he aterrizado en la terminal nueva, como consecuencia, darte una vuelta enorme por las pistas.
Lo de las maletas, tampoco tiene nada que ver con las compañias, eso son empleados del aeropuerto.
Los autobuses que te llevan por las pistas del aeropuerto, lo mismo, no tiene nada que ver con la compañía. Son compañias asociadas, alquileres de estos autobuses por parte de la compañía. Si no lo tenían en tu caso es que no había disponibilidad.
El servicio de bar, comprensible que sea mas caro, no pueden ofrecer esos precios de 10€ por trayecto sin aumentar los precios de alguna forma, sino no ganarían dinero de verdad.
Sobre el tiempo, siempre tardas casi 3 horas para un vuelo de 50 minutos, te lo digo porque lo hago muchas veces al año y con diferentes compañias: Iberia, Spanair, Air Europa…
Y por lo que cuentas de los asientos y el chupa chups, doy como vencedora a Vueling: la comodidad y el trato al público están por delante siempre . Las empresas de bajo coste no son comparables, son todas iguales, en todo, lo unico que las diferencia es el trato al cliente y los precios, que es por donde nos tenemos que guiar, no de cosas que no dependen de ellos.
otra ventaja que tienen es que a las 6 de la mañana (4,45 en la carretera), no tienes atasco, en el aeropuerto aparcas en la puerta, no hay colas, no hay gente, no hay………. ni calles casi.
Como inconveniente que la churrería del pueblo de Barajas, la que está en la plaza (Toribio) a esas horas todavía no ha abierto.
Lucas, hablo con la voz de la experiencia, ya sé que ellos no dependen de los autobuses del aeropuerto ni de la pista. Lo único que cuento es lo que he vivido, una anécdota que para un vuelo de 50 minutos, tardé 3 horas.
El AVE dará mucho que hablar.
[…] Actualización: se me olvidó enlazar con otras experiencias que tuve con la compañía. […]
[…] Se da por supuesto que es mi medio de locomoción en mi vida diaria, pero no es el único, puesto que al estar en Cardiff (Reino Unido), el avión suelo utilizarlo para trasladarme a Madrid, unas veces con mejor suerte que otras, pero al fin y al cabo contento. […]
No me gustó nada volar con Vueling y si puedo evitarlo no lo haré más. Tuve que comprar un billete en el aeropuerto de Paris urgentemente y la única opción ese día era la de Vueling.Después de casi una hora para procesar mi billete, me dieron mal el cambio, mejor dicho, no me lo dieron y al reclamarlo la empleada me tuvo otros veinte minutos esperando para hacer caja. Después de comprobar que se había equivocado me dio el dinero y yo me fui a facturar el equipaje. Al rato, se dirige a mí en un tono poco amigable reclamándome el dinero y amenazándome con registrarme los bolsillos y el bolso. Todo esto ocurría a la vista de todas las personas que había en la sala. Para no discutir más y acordándome de toda su familia le devolví MI dinero. Me hicieron sentir fatal. Claro que al subir a bordo descubrí que con la «familiaridad» que te tratan no me extrañó haber recibido ese trato tan denigrante. Ya se sabe, dónde hay confianza da asco.